Barriada
Almocábar

Construida a mitad de los años 80, la Barriada Almocábar se convirtió en la primera urbanización de chalets adosados de Ronda. Está situada en un terreno triangular limitando con la vía del tren y la Avenida de Málaga. Las calles trazan una ligera curva que tenía como centro la rotonda de entrada de la circunvalación, prevista también en la misma época. Originalmente la barriada disponía de un carril de servicio paralelo a la carretera, pero la reforma para construir la barriada UE19 desplazó el eje de la Avenida de Málaga invadiendo este carril y la zona de jardines con palmeras. Las casas son todas de estilo similar con garaje en el semisótano y dos plantas, pequeño jardín de entrada y patio posterior. En el frontal de las dos primeras manzanas se construyeron sendos edificios con locales comerciales y dos plantas de pisos. El estilo recuerda ligeramente a la fachada del cortijo que había en esta ubicación. La barriada no dispone de servicios de ningún tipo salvo un campo de fútbol de tierra que hubo durante años en la zona más exterior. Posteriormente el terreno se ha urbanizado con jardines en lo que se conoce como Plaza del Caballo por la estatua que tiene.

El nombre de la Barriada Almocábar corresponde a las murallas de Almocábar situadas en la otra punta de Ronda, en el Barrio de San Francisco. Es un poco desafortunado ya que la palabra Almocábar significa Cementerio. Aunque eran viviendas de protección oficial VPO, su forma de chalets adosados hizo que tuvieran un precio más elevado, y al mismo tiempo presentaban algunos defectos y humedades, por lo que los rondeños bautizaron a estas casitas como Los Ricos También Lloran, en relación a una telenovela mexicana de moda en la época.